Los objetivos que se definan en los planes y proyectos de la Universidad Autónoma de Chile serán considerados de calidad en la medida que resulten pertinentes, desafiantes, claros, medibles y gestionables.
Los objetivos que se definan en la Universidad deben ser pertinentes en términos institucionales, sociales y académicos; es decir, consistentes con la identidad, valores y estrategia de la organización, responder a las necesidades, demandas y expectativas de los grupos de interés y del contexto social en el que se inserta, y enmarcarse en las definiciones del proyecto académico, sus focos, disciplinas y áreas prioritarias.
Los objetivos y metas que se establezcan deben ser desafiantes y movilizadoras hacia un desempeño superior, tanto respecto de la línea de base con que se parte como de la comparación con el entorno de referencia. En su formulación, los objetivos deben señalar con claridad el estado deseado que se pretende
alcanzar, de modo que sirvan de orientación a la toma de decisiones en situaciones concretas. Asimismo, los objetivos deben estar operacionalizados en una o más metas, cuya verificación sea posible de realizar mediante la medición de indicadores o índices que faciliten su cálculo y comunicación.
Los objetivos que se definan deben ser también razonablemente alcanzables, considerando el tiempo y los recursos y capacidades disponibles o que se puedan desarrollar en el horizonte de planificación en que se insertan. En aquellos casos en que para el logro de un objetivo estratégico sea imprescindible contar con nuevas capacidades institucionales, su desarrollo debe especificarse y agregarse como objetivo adicional al plan.
Los objetivos deben orientar efectivamente la toma de decisiones y la asignación de recursos en la gestión de la Universidad, estructurándose en forma articulada en planes de desarrollo, mejoramiento y operativos aplicables a todas las áreas de la institución.